REVISTA "LIFE" 21 DE ABRIL DE 1972. CHARLES CHAPLIN RECIBE EL OSCAR HONORÍFICO

Revista "LIFE" correspondiente al número 15 del volumen 72 de fecha 21 de abril de 1972. Trata entre otros temas la Guerra del Vietman y la entrega del Oscar honorifico a Charles Chaplin. Adquirido en EEUU en junio de 2009.

HELLO CHARLIE!

Veinte años hacía que Charles Spencer Chaplin no pisaba suelo norteamericano desde que en septiembre de 1952 se le impidió la entrada en los Estados Unidos tras asistir al estreno de "Candilejas"("Limelight", 1952) en Europa. Era esta la culminación de una persecución a la que había sido sometido desde que tras el final de la segunda guerra mundial el gobierno americano amparandose en la seguridad nacional iniciara una "caza de brujas" en busca que todos aquellos simpatizantes del partido comunista, a los que se consideraba traidores y antipatriotas. Cierto es que Chaplin siempre estuvo en el punto de mira de quienes le consideraron "peligroso". Los mensajes que transmitia en algunas de sus películas lo ponían en evidencia. "Tiempos modernos" ("Modern Times", 1936), era un alegato contra el capitalismo; en "El Gran dictador" ("The grat dictator", 1940) proponia un mundo igual para todos y "Monsieur Verdoux" (1947) comparaba los crimenes del protagonista con los de las grandes potencias en periodos de entreguerras. Si a ello le sumamos su participación en mitines en favor de rusia y una vida sentimental en los limites de la legalidad (se le acusó de incumplir la Ley Mann según la cual era delito trasladarse a otro estado para fines sexuales, cuando llevó a Joan Barry , novia por aquel entonces a la que superaba en 30 años su edad, desde Los Ángeles hasta Nueva York. Todo ello generó un caldo de cultivo que facilitó al Comité de Actividades Antiamericanas que presionara la deportación de Chaplin "por contribuir a destruir la fibra moral de américa".

Este comité permaneció activo desde 1938 a 1975. Elaboró Listas Negras de actores, guionistas, directores, etc presuntamente vinculados con el Partido Comunista entre ellos los llamados "Diez de Hollywood" (guionistas y autores). Y mientras unos plantaron cara al llamado Macarthismo como Humphrey Bogart o Lauren Bacall otros colaboraron con el Comité delatando a sus propios compañeros.

En 1953, Charles Chaplin junto a su esposa Oona, se establece en Suiza. En 1957 parodia la vida americana con la pelicula "Un Rey en Nueva York" ("A king in New York") y en 1966 rueda su última película "La Condesa de Hong Kong" (The Countess of Hong Kong"). En 1964 publica su autobiografía en la que cita textualmente: "Mis amigos me han preguntado cómo me las arreglé para suscitar esta hostilidad entre los americanos. Mi estupendo pecado fue, y sigue siendo, mi caracter no conformista. Aunque no soy comunista, me negué a seguir la corriente, y a odiarlos. Esto, naturalmente, ha molestado a muchos, incluyendo a la Legión Americana(...). Yo era opuesto al Comité de Actividades Antiamericanas, ya de principio un título deshonesto, lo suficientemente elástico para cerrar su garra alrededor de la garganta y estrangular la voz de cualquier ciudadano americano cuya honrada opinión sea minoritaria..." (Charles Chaplin, "Mi autobiografía", 1964).

Durante la década de los 70 compone los acompañamientos musicales de los cortos de la First National (1918-1923) y de "El Chico" ("The Kid", 1921) "El Circo" ("The Circus", 1928) y "Una mujer de Paris" ("A woman of Paris", 1923).

El 10 de abril de 1972, la Academia de las Artes Cinematografias acuerda otorgar el Oscar Honorifico por su contribución en convertir en cine en el arte del siglo XX a Charles Chaplin. Así en un "Dorothy Chandler Pavilium" repleto y tras veinte años de ausencia, el pequeño vagabundo, anciano, con apenas fuerzas dijo: "Las palabras parecen tan vacías, distantes, dementes. A pesar de todo, ustedes todos son muy lindos. Los amo", recibiendo una largo y cálido aplauso como una solicitud de perdón del pueblo americano hacia uno de los genios del séptimo arte.

Como dato indicaré que éste fue el segundo Oscar obtenido por Chaplin. El primero lo lograría en la primera edición de estos premios el 19 de mayo de 1929 por "El Circo", premiando su versatilidad como actor, guionista, productor y director del film.

EL ENCUENTRO DE DOS GENIOS

Este mismo número de la revista LIFE del 21 de abril de 1972, recoge una fotografía que por su interés no puedo dejar de comentar. Se trata del encuentro que Chaplin mantuvo con Groucho Marx, de entre los muchos artistas de Hollywood que le quisieron saludar con motivo de su visita a EEUU tras veinte años de ausencia. Esta imagen, de ambos genios mayores me recuerda un pasaje de "Groucho y yo" ("Groucho and me", 1959) la autobiografia de Groucho Marx que relata como conoció a Chaplin y que me permito reproducir aquí.

"A media manzana de distancia de un teatro de aspecto repulsivo oí unas sonoras carcajadas. Decidí que debía entrar y ver qué era lo que hacía tanta gracia. En el escenario había ocho o diez personajes en un número llamado 'Una noche en el club'. Uno de esos actores llevaba un bigote muy pequeño y unos zapatos muy grandes, y mientras una corpulenta y desarrollada soprano cantaba un lieder de Schubert, el otro, alternativamente, escupía al aire un surtidor de migas de pan y la apedreaba con naranjas podridas. Al terminar el número el escenario estaba hecho un asco. Saliendo del teatro, regresé a la consigna para encontrarme con mis hermanos. Les dije que acababa de ver a un gran cómico. Lo describí...Un hombre pequeñito con un diminuto bigote, un bastón, un bombín y unos zapatos muy grandes. Luego me puse a andar por la consigna, imitándolo lo mejor que pude. Cuando terminé de alabar sus excentricidades, mis hermanos apenas podían contener el deseo de verlo.

Los circuitos Sullivan-Cosidine y Pantages corren paralelos a la costa, y finalmente cooincidimos con él en Vancouver. Yo lo había elogiado tanto que mis hermanos se sentían algo escépticos. Después, él apareció en escena, y en menos de cinco minutos todos reconocieron que era como yo lo había descrito y aún mejor. Después de la representación, fuimos a su camerino y nos presentamos. Le encontramos en un sucio cuartucho que compartía con otros tres actores cómicos. Después de las presentaciones preliminares, le dijimos lo mucho que nos había gustado. Durante la conversación subsiguiente, nos explicó que ganaba 50 dólares a la semana y que, aunque le habían prometido 60, nunca los había cobrado.

El hombrecillo había cfreado una conmoción considerable en la industria cinematográfica. En realidad, nos explicó que un magnate cinematográfico le había ofrecido 500 dólares a la semana para que trabajase para él. Lo felicitamos.

-¿Cuándo empieza?-le pregunté.

-No voy a aceptarlo-contestó.

-¿por qué no?-inquirí, atónito-.Ahora sólo gana cincuenta a la semana. ¿No le gusta el dinero?

-Ya lo creo que sí-contestó (y, amigo, más adelante se cuidó bien de demostrarlo)-. Pero, miren, muchachos; yo soy capaz de gtanarme cincuenta dólares a la semana, pero ningún cómico vale quinientos. Si firmo con él y no tengo éxito, me despedirán. Y entonces, ¿que será de mi? Os lo diré: ¡me quedaré en la miseria!

Era muy extraño aquel Charlie Chaplin. Cuando le vi por primera vez llevaba lo que antaño había sido un cuello blanco y una corbata de lazo negro. No puedo describir bien su aspecto, pero en cierto modo parecia un cura que hubiese sido excomulgado, pero que se resistiera a renunciar a sus hábitos(...).

Volvía a encontrarm,e con Charlie mientras actuábamos en el teatro Orpheum de Los Ángeles, algunos años más tarde. El seguía llevando el cuello y la corbata característicos. La única diferencia es que ya no estaban sucios. Oh, si, había otro pequeño cambio. Se había convertido en el cómico más famoso del mundo(...).

Charlie vive ahora en Suiza, pero el lugar en el que habita no cambia nada. Sigue siendo el más grande actor cómico que el cine, o cualquier otro espectáculo, haya popularizado".